Hay una estupidez creciente que inunda nuestra sociedad que viene de la mano de quien o quienes se dicen “progresista”, dando a entender que se está a favor de cosas tales como igualdad de sexos, derechos para los homosexuales, cuidado del ambiente o reivindicación del indigenismo. Hasta aquí llega el discurso bienpensante, porque como en definitiva se trata de política, es raro que tal declaración de buenas intenciones se proyecten a cosas tales como una verdadera separación de la religión del estado. Al contrario, vemos tristemente que en nuestra Latinoamérica gobiernos que dicen representar a los indígenas, como Evo Morales, cae en los más gruesos pensamientos irracionales muy relacionado con lo mágico – religioso. Nicolás Maduro, diciendo que apareció la cara de Chávez en una pared es sintomático.
Como así de limitado es este discurso bien pensante – progresista, también lo es en cuanto al nivel de irracionalidad que posee. Se ha llegado a un punto de la discusión política donde los HECHOS y EVIDENCIAS de poco valen, siempre y cuando lo que se diga “encaje” con lo que se considera políticamente correcto.
Hace ya un tiempo que escuché a algún “catedrático” de esos que se dedican a dar cursos de x –ismo (remplazar la x por indígena, ambiente, ecología, femenino, etc.) y que la Ley Federal de educación han hecho crecer como hongos en la humedad, decir el siguiente dislate (más o menos textual):
“Los del norte rico han hecho el planisferio fuera de proporciones, de tal manera que los países del norte aparentan ser más grandes de lo que son”.
Creí que se trataba de un charlatán con título más, pero de a poco descubrí que la estupidez estaba extendida mayoritariamente en algunos claustros de la zona de “humanidades”.
Ahora me he enterado que la estupidez llegó al Ministro de Defensa que presentó este planisferio centrado en Argentina.
La estupidez aquí:
La idea, mirándola con piedad, puede ser hasta útil para enseñar geografía. No normal, a mi entender, es que se lo tome con indiferencia.
Lo peor de todo son las frases que los periódicos reprodujeron del señor ministro en la presentación de esta estupidez novedad.
El ministro rebuznó:
«En general, el planisferio que tradicionalmente conocemos tiene más acentuado el norte del mundo, reflejando volúmenes que son desproporcionados con la realidad», explicó el titular de la cartera”
“Resulta un sano ejercicio preguntarnos cómo sería un mapamundi centrado en la Argentina y en el cual se respeten las escalas.”
Señor ministro:
Primero: La desproporción que usted se refiere se debe a que se está proyectando en un plano una superficie esférica.
Segundo: No está más acentuado el norte que el sur. Si sucediera, entonces las curvas de los meridianos (en el caso de presentar meridianos curvos) tendrían distinto radio de curvatura en la parte norte con respecto al sur. Es evidente que esto no ocurre.
Tercero: Lo que usted describe no es más que una “ilusión óptica”. Cuando se presentan los meridianos, tanto si se presentan curvos como rectos, se produce un “agrande” de las imágenes que están cercanas a los polos. Esto sucede tanto para el norte como para el sur, tal como está en el punto segundo. Al haber más masa continental en el norte del ecuador, sucede el “efecto óptico” de que se agrandó más la imagen que corresponde al norte. Como en el sur la imagen que se agranda está pintada de celeste, porque hay agua allí, espero que esté enterado, este “agrandamiento” no es advertido.
Cuarto: Los planisferios se centran en el punto (0,0), intersección del meridiano de Greenwich y el ecuador. Si vamos a optar por la teoría conspiranoica que tan bien le caen a su gobierno para justificar barrabasadas, entonces tenemos que pensar que los africanos están involucrados, puesto que es África el continente que menor desproporción tiene y el que está en el centro de la imagen.
Quinto: Por una cuestión histórica el meridiano de Greenwich se sitúa de manera tal que pasa por el Observatorio Astronómico de Greenwich.
Si hubiera alguna intención ideológica pro inglesa, cabria esperar que el meridiano pase por la mitad de Gran Bretaña, o por el centro de Londres. Ninguna de las dos cosas sucede. La razón simple de que el meridiano cero pase por Greenwich es que las mediciones fundamentales de la tierra se hicieron allí, donde trabajaban los astrónomos más brillantes de la época. Fue una cuestión de comodidad, no iban a establecer el punto cero a una distancia incómoda de llegarse para hacer las mediciones, o que implicaría cálculos extras.
Quinto: Queda por dilucidar el por qué en Greenwich estaban los astrónomos más brillantes de su época. Eso tendrá que preguntárselo a sus madres. Parir futuros astrónomos en un país imperialista ¡A quién se le ocurre!